Oriental Fusión
La danza oriental fusión es un viaje a diferentes pueblos y culturas, recoge sus tradiciones, sus movimientos, sus gestos y forma de expresarse. El principio de este viaje son los movimientos pélvicos de la danza del vientre que se enriquecen con otras formas de arte y movimiento. Un viaje desde el Rajastan a Andalucia, con parada en Turquía y el alto Egipto. Los colores de la India, la fuerza del flamenco o la alegría y desparpajo del pueblo gitano se funden creando un este nuevo lenguaje mestizo.
FLAMENCO FUSIÓN
La fuerza y pasión del flamenco, unidas a la sensualidad, suavidad y el serpenteo de la danza oriental, producen una fusión única. Nos evoca al mestizaje y color árabe-andaluz de los palacios, jardines y mezquitas de la época Andalusí.
FUSIÓN INDIA
El colorido, la alegría, espiritualidad y la rigurosidad técnica de la que son características las danzas hindús, se fusionan con la sensualidad, suavidad y delicadeza de las danzas orientales árabes. Un viaje a tiempos remotos, al desierto, a palacios de marahas y princesas...
FUSIÓN ORIENTAL GYPSY
El pueblo gitano o gypsy ha sido famoso por sus habilidades en las artes, especialmente en la danza y la música. Son grandes artistas, apasionados y románticos. Han sabido incorporar y fusionar elementos de la música y danza de diversas culturas que han encontrado allá por donde han emigrado, pero sin perder su identidad original y sus costumbres.
Beneficios de la danza oriental fusión
Esta danza, tiene innumerables beneficios, tanto físicos como psicológicos. Es un buen ejercicio cardiovascular, que mejora la flexibilidad y la fuerza muscular de quien la practica, siendo ella misma la que controla su nivel de exigencia. Es por esto, que es una danza apropiada para personas de todas las edades y constitución. Aporta una silueta característica, que consiste en piernas y pies fuertes, cadera firme, con una musculatura flexible, cintura marcada y definida, plexo abierto y hombros relajados, brazos largos y elegantes y una espalda correctamente alineada. En una sesión bien estructurada, se trabajan prácticamente todos los músculos del cuerpo, como pueden ser cuello, espalda, brazos, abdomen, glúteos y piernas, pero la zona que más se trabaja por excelencia, es la musculatura del suelo pélvico, que tan importante es para las mujeres.